No limites tu vida a una taza de agua
Realizar una prueba psicológica para comprobar su capacidad de toma de decisiones.
Hoy vas a viajar muy lejos. Al salir de casa, un dios vestido de blanco y con barba blanca aparece de repente frente a ti. Te dice que puede darte un regalo para ayudarte en tu viaje, pero solo puedes elegir uno de los siguientes:
1.Un caballo.
2. Un camello.
3. Un elefante fuerte.
¿Cuál elegirías para montar?
Deja que tu mente se detenga aquí y explora las razones que hay detrás de tu toma de decisiones. Hazte dos preguntas:
1. Cualquiera que sea tu elección, ¿por qué elegiste esto?
2. ¿Sobre qué base se excluyen los otros dos elementos?
¿Cómo excluyes otras opciones en tu vida diaria?
Cualquiera que sea tu respuesta, aquí está la mejor respuesta que he escuchado jamás.
Mira a dónde voy a viajar.
¿Es así el pensamiento lógico de la gente corriente? A mí me gustan los caballos porque son poderosos, hermosos y pueden caminar muy rápido. ¡Me gusta la sensación de galopar! ¡No me gustan los camellos ni los elefantes porque son demasiado lentos! Pero si vas al desierto, morirás de sed si no puedes montar en elefante a 20 kilómetros de distancia. Si vas a la pradera, ¿de qué te sirve un camello? Así, la mente avanzada comprenderá que la elección de un animal no depende de lo que signifique para mí en este momento, sino de lo que valga para mí en el futuro.
El valor de una cosa no depende del valor que se le atribuye, sino del valor que tendrá en el futuro. Esto se llama valor futuro.
Si una persona tiene un vaso de agua en su mano, ¿cuál es su mejor opción a continuación?
Algunos dicen que el agua debe ser cargada, algunos dicen que debe ser compartida con otros, algunos dicen que deben analizarse y usar el agua de la mejor manera…
¿Cual es tu respuesta?
Os digo, una persona con una copa en la mano, debe hacer lo que quiera hacer, y ¿cuál es la relación inevitable con la copa?
Cada uno de nosotros tiene una taza así en el corazón. La miramos fijamente por miedo a perderla, limitando nuestros horizontes, endureciendo nuestra mente y evitando que veamos lo que es realmente valioso. Algunas personas llaman a la taza "profesional", otras a la "emocional" y otras a la "cómoda y buena para el trabajo". ¿Cuál es tu taza?
Pero recuerda: ¡no ates tu valiosa vida a una taza de agua!